Los 5 principios FIPPE

Compartimos los 5 Principios de la Fundación FIPPE

1 – Amar la Patria

Amar la Patria implica comprometerse con el bienestar y la mejora del país, cuidando y cultivando su historia y cultura. Significa priorizar a nuestro pueblo, comunidad, familia, afectos, ancianos y niños, honrando todo aquello que nos hace hijos dignos de una nación soberana.

2 – Comprender otras culturas

Abrirnos como sociedad al conocimiento y entendimiento respetuoso de otras civilizaciones, culturas, creencias y formas de vida enriquece el espíritu y fortalece los lazos de amistad entre los pueblos. Este enfoque elimina la mirada de superioridad de unos sobre otros, fomentando la convivencia armónica y el respeto mutuo.

3 – Ser humildes

La humildad nos invita a respetarnos como iguales, ya sea como individuos, etnias, culturas o naciones. Es la base del aprendizaje constante y el cimiento de la honestidad. Por el contrario, la soberbia y la arrogancia son la raíz de la violencia y la opresión hacia las personas y las sociedades. En su forma extrema, estas actitudes pueden llevar a la destrucción de vidas y a la sumisión cruel de pueblos y naciones.

4 – Pensar de manera orgánica

La lógica simplista de reducir todo a dos posibilidades inmutables —blanco o negro— impide comprender la dinámica del mundo y su diversidad, abriendo las puertas al fanatismo. Tanto la naturaleza como las sociedades están en constante movimiento, con fuerzas contradictorias que coexisten y se complementan. El pensamiento orgánico, que es el lenguaje de la naturaleza, puede resumirse en una frase milenaria: “Una ladera con luz, una ladera con sombra, una montaña”.

5 – Obrar con el ejemplo

Ya sea como individuos, pueblos o naciones, debemos demostrar coherencia e integridad a través de nuestros hábitos, modos y acciones. Obrar con el ejemplo significa “hablar solo de lo que se hace”, evitando promesas que, en muchas ocasiones, resultan ser engaños premeditados.